BULMA Y SON GOKU
Publicación: 3 de Diciembre de 1984, Weekly Shonen Jump (Ed: Shueisha)
Portada:
Spoiler:
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La historia arranca presentándonos un mundo atemporal, con reminiscencias de un pasado remoto. En el Monte Paoz, una cordillera alejada de cualquier vestigio de civilización, un muchacho con una cola de mono viene de cortar leña subido a un enorme tocón, saludando a una familia de simios cercanos.
Al llegar a su casa, el muchacho, haciendo gala de una enorme fuerza y técnica, destroza el tocón de madera con un solo golpe y guarda los trozos de leña resultantes, alegando a continuación que tiene hambre.
El chico entra en la casa y se dirige a una esfera de aspecto vítreo en calidad de “abuelo” diciéndole que va a buscar comida.
Al mismo tiempo, una joven sale de su coche, buscando algo por la zona con un extraño aparato, volviéndose a montar alegando que no debe andar muy lejos.
Mientras camina por el monte, el niño piensa que hace mucho que no come pescado, y se lanza por un barranco por cuyo fondo pasa un río, sujetándose a la rama de un árbol antes de estrellarse y aterrizando grácilmente en una roca, el chico se desnuda y utiliza su cola de mono como caña de pescar, llamando la atención de un enorme pez, que confunde al muchacho con un mono o un lince, el pez se dispone a atacar saliendo del agua cuando el niño lo esquiva y lo mata de una fortísima patada en el aire y llevándoselo a casa.
Mientras está dirigiéndose a casa por un camino aparece el coche de la chica, que apenas tiene tiempo de reaccionar para evitar atropellarlo.
El muchacho cree que el coche es un monstruo que le quiere arrebatar su presa, así, levanta el coche por encima de su cabeza y lo lanza, destrozándolo, a continuación, la chica, maltrecha sale por una ventanilla armada con una pistola y el chaval la confunde con un fantasma, ella dispara y este cae al suelo agarrándose la cabeza y quejándose por el dolor, a pesar de estar aparentemente ileso. Anonadada, la chica tendría que ver como el muchacho lograría reponerse y se dispondría a atacar, y no tendría más remedio que decirle que no es un fantasma como él creía, sino una persona.
Esto hace retroceder al niño, que detiene el ataque aunque mantiene una pose defensiva, mientras comprueba que efectivamente, se parece a él, pero parece más delgada y débil, ella responde que eso es porque es una chica, lo que sorprende mucho al chico, que dice que es la primera vez que ve a otra persona además de su abuelo, y que este siempre decía que si alguna vez se encontraba con una chica debía tratarla con amabilidad, el muchacho se da cuenta de que ella no tiene cola, y ella al mismo tiempo repara en la cola de él, pensando divertida que se trata de un adorno.
Él también parece sorprenderse al enterarse de que el monstruo era en realidad un coche, el chico invita a comer a la chica a su casa y esta acepta, no sin cierto reparo, empezando a pensar que la fuerza del chico podría serle útil.
Al llegar a la casa el niño saluda otra vez a la bola y la chica se abalanza sobre ella, llamándola “Bola de dragón” y diciendo que era el objeto que estaba buscando, él la aparta de la bola, aparentemente molesto, diciendo que es un recuerdo de su abuelo, y ella saca otras dos bolas iguales, algo que confunde bastante al chico, ella le cuenta que en realidad son bolas de dragón, que encontró una de ellas en el sótano de su casa y que tras preguntarle a todo el mundo, descubrió una vieja leyenda en unos antiguos documentos, alegando que hay siete de esas bolas en total, y que en su interior hay un número creciente de estrellas rojas, de una a siete, entonces el chico se da cuenta de que en la de su abuelo hay cuatro estrellas y la joven se refiere a ella como la Shushinchu, y a la que ella encontró como la Ryanshinchu, la bola de dos estrellas, y que hace apenas unos días, encontró la Ushinchu, la de cinco, en un valle al norte.
El muchacho pregunta que qué quiere hacer cuando las reúna todas y ella le cuenta que cuando se reúnen las siete, aparece Shenron, el dios dragón y concede un deseo, sea lo que sea, también cuenta que tiempo atrás, alguien las utilizó para convertirse en rey, y que con el tiempo se han desperdigado, la chica confiesa que no sabía qué pedir, y que en principio pensó en un montón de fresas que no se acabara nunca, pero que ahora quiere un novio guapo, la chica le pide la bola al niño y él se niega, a lo que ella decide cambiar de estrategia, subiéndose la falda y diciéndole que si le da la bola, le dejará tocar un poco, logrando el rechazo del niño, al contrario de lo que ella habría esperado, por lo que la chica le pide que al menos le acompañe con la bola en su viaje, él acepta, aunque deja claro que la bola no se la dará, ella parece conforme con la situación siempre y cuando se la preste en un momento dado, aunque para sus adentros piensa que una vez que se reúnen las bolas salen volando desperdigadas por el cielo, y que el chaval le sería perfecto como guardaespaldas.
Así, ambos dan comienzo su viaje, en el que la muchacha, gracias a un radar que ha inventado para localizar otras bolas gracias a las vibraciones especiales que estas emiten, determina que la más próxima está a 1200 kilómetros al Oeste, mientras la chica busca algo en el interior de una caja ambos se presentan, él como Son Goku y ella como Bulma (Nombre que le haría mucha gracia al chico, para disgusto de la propia Bulma)
Habiendo encontrado aparentemente lo que necesita, Bulma cogería una pequeña cápsula de una caja, apretaría un botón y la lanzaría, Goku quedaría absorto al ver cómo el pequeño aparato explota y deja tras de sí una moto último modelo., catalogando el prodigio como magia y a Bulma como una bruja. Ella diría que son cápsulas Hoi-Poi, algo muy normal en la ciudad, ambos subirían a la moto (Que de nuevo sorprendería mucho a Goku por la enorme velocidad que podían alcanzar subidos a la moto)
Un rato después de comenzar el viaje Bulma lograría no vería un desfiladero y los dos volarían subidos en la moto varios metros, aterrizando sin problemas de milagro, ella comentaría que tiene que irse un momento, y él preguntaría para qué, la chica contestaría escandalizada que cuando una chica dice eso es porque tiene que ir al baño, y él se preguntaría por qué tenía que irse tan lejos para algo así, en lugar de hacerlo de pie contra cualquier árbol.
Tras haberla perdido de vista, Goku escucha un grito y va corriendo, pensando que algo le ha pasado, y efectivamente, se encuentra con que un enorme pterosaurio ha capturado a Bulma, y le dice a Goku que va a hablar con ella un momenta mientras le ata a un árbol y emprende el vuelo llevándosela en sus garras, Bulma grita pidiendo ayuda y Goku al fin comprende la situación, decidiéndose a echarle una mano, y desatándose fácilmente del árbol con su cola.
Maldiciendo al animal por poder volar y no poder alcanzarlo, Goku decide utilizar la moto para hacer lo mismo que había hecho Bulma unos minutos antes, así el chico se sube y arranca la moto, que sale disparada hacia otra elevación desnivel del terreno, volando por los aires, en pleno vuelo y habiéndose acercado bastante a Bulma y al pterosaurio, Goku sale de la moto saca su bastón y le ordena que se estire, el bastón se alarga y golpea con él al pterosaurio, matándolo en el acto, en plena caída Goku lo lanza, consiguiendo sujetar a Bulma a un barranco con él, salvándola de una muerte segura.
El primer capítulo concluye con Bulma llorando colgando del abismo, gritando que se ha hecho pipí.
Al llegar a su casa, el muchacho, haciendo gala de una enorme fuerza y técnica, destroza el tocón de madera con un solo golpe y guarda los trozos de leña resultantes, alegando a continuación que tiene hambre.
El chico entra en la casa y se dirige a una esfera de aspecto vítreo en calidad de “abuelo” diciéndole que va a buscar comida.
Al mismo tiempo, una joven sale de su coche, buscando algo por la zona con un extraño aparato, volviéndose a montar alegando que no debe andar muy lejos.
Mientras camina por el monte, el niño piensa que hace mucho que no come pescado, y se lanza por un barranco por cuyo fondo pasa un río, sujetándose a la rama de un árbol antes de estrellarse y aterrizando grácilmente en una roca, el chico se desnuda y utiliza su cola de mono como caña de pescar, llamando la atención de un enorme pez, que confunde al muchacho con un mono o un lince, el pez se dispone a atacar saliendo del agua cuando el niño lo esquiva y lo mata de una fortísima patada en el aire y llevándoselo a casa.
Mientras está dirigiéndose a casa por un camino aparece el coche de la chica, que apenas tiene tiempo de reaccionar para evitar atropellarlo.
El muchacho cree que el coche es un monstruo que le quiere arrebatar su presa, así, levanta el coche por encima de su cabeza y lo lanza, destrozándolo, a continuación, la chica, maltrecha sale por una ventanilla armada con una pistola y el chaval la confunde con un fantasma, ella dispara y este cae al suelo agarrándose la cabeza y quejándose por el dolor, a pesar de estar aparentemente ileso. Anonadada, la chica tendría que ver como el muchacho lograría reponerse y se dispondría a atacar, y no tendría más remedio que decirle que no es un fantasma como él creía, sino una persona.
Esto hace retroceder al niño, que detiene el ataque aunque mantiene una pose defensiva, mientras comprueba que efectivamente, se parece a él, pero parece más delgada y débil, ella responde que eso es porque es una chica, lo que sorprende mucho al chico, que dice que es la primera vez que ve a otra persona además de su abuelo, y que este siempre decía que si alguna vez se encontraba con una chica debía tratarla con amabilidad, el muchacho se da cuenta de que ella no tiene cola, y ella al mismo tiempo repara en la cola de él, pensando divertida que se trata de un adorno.
Él también parece sorprenderse al enterarse de que el monstruo era en realidad un coche, el chico invita a comer a la chica a su casa y esta acepta, no sin cierto reparo, empezando a pensar que la fuerza del chico podría serle útil.
Al llegar a la casa el niño saluda otra vez a la bola y la chica se abalanza sobre ella, llamándola “Bola de dragón” y diciendo que era el objeto que estaba buscando, él la aparta de la bola, aparentemente molesto, diciendo que es un recuerdo de su abuelo, y ella saca otras dos bolas iguales, algo que confunde bastante al chico, ella le cuenta que en realidad son bolas de dragón, que encontró una de ellas en el sótano de su casa y que tras preguntarle a todo el mundo, descubrió una vieja leyenda en unos antiguos documentos, alegando que hay siete de esas bolas en total, y que en su interior hay un número creciente de estrellas rojas, de una a siete, entonces el chico se da cuenta de que en la de su abuelo hay cuatro estrellas y la joven se refiere a ella como la Shushinchu, y a la que ella encontró como la Ryanshinchu, la bola de dos estrellas, y que hace apenas unos días, encontró la Ushinchu, la de cinco, en un valle al norte.
El muchacho pregunta que qué quiere hacer cuando las reúna todas y ella le cuenta que cuando se reúnen las siete, aparece Shenron, el dios dragón y concede un deseo, sea lo que sea, también cuenta que tiempo atrás, alguien las utilizó para convertirse en rey, y que con el tiempo se han desperdigado, la chica confiesa que no sabía qué pedir, y que en principio pensó en un montón de fresas que no se acabara nunca, pero que ahora quiere un novio guapo, la chica le pide la bola al niño y él se niega, a lo que ella decide cambiar de estrategia, subiéndose la falda y diciéndole que si le da la bola, le dejará tocar un poco, logrando el rechazo del niño, al contrario de lo que ella habría esperado, por lo que la chica le pide que al menos le acompañe con la bola en su viaje, él acepta, aunque deja claro que la bola no se la dará, ella parece conforme con la situación siempre y cuando se la preste en un momento dado, aunque para sus adentros piensa que una vez que se reúnen las bolas salen volando desperdigadas por el cielo, y que el chaval le sería perfecto como guardaespaldas.
Así, ambos dan comienzo su viaje, en el que la muchacha, gracias a un radar que ha inventado para localizar otras bolas gracias a las vibraciones especiales que estas emiten, determina que la más próxima está a 1200 kilómetros al Oeste, mientras la chica busca algo en el interior de una caja ambos se presentan, él como Son Goku y ella como Bulma (Nombre que le haría mucha gracia al chico, para disgusto de la propia Bulma)
Habiendo encontrado aparentemente lo que necesita, Bulma cogería una pequeña cápsula de una caja, apretaría un botón y la lanzaría, Goku quedaría absorto al ver cómo el pequeño aparato explota y deja tras de sí una moto último modelo., catalogando el prodigio como magia y a Bulma como una bruja. Ella diría que son cápsulas Hoi-Poi, algo muy normal en la ciudad, ambos subirían a la moto (Que de nuevo sorprendería mucho a Goku por la enorme velocidad que podían alcanzar subidos a la moto)
Un rato después de comenzar el viaje Bulma lograría no vería un desfiladero y los dos volarían subidos en la moto varios metros, aterrizando sin problemas de milagro, ella comentaría que tiene que irse un momento, y él preguntaría para qué, la chica contestaría escandalizada que cuando una chica dice eso es porque tiene que ir al baño, y él se preguntaría por qué tenía que irse tan lejos para algo así, en lugar de hacerlo de pie contra cualquier árbol.
Tras haberla perdido de vista, Goku escucha un grito y va corriendo, pensando que algo le ha pasado, y efectivamente, se encuentra con que un enorme pterosaurio ha capturado a Bulma, y le dice a Goku que va a hablar con ella un momenta mientras le ata a un árbol y emprende el vuelo llevándosela en sus garras, Bulma grita pidiendo ayuda y Goku al fin comprende la situación, decidiéndose a echarle una mano, y desatándose fácilmente del árbol con su cola.
Maldiciendo al animal por poder volar y no poder alcanzarlo, Goku decide utilizar la moto para hacer lo mismo que había hecho Bulma unos minutos antes, así el chico se sube y arranca la moto, que sale disparada hacia otra elevación desnivel del terreno, volando por los aires, en pleno vuelo y habiéndose acercado bastante a Bulma y al pterosaurio, Goku sale de la moto saca su bastón y le ordena que se estire, el bastón se alarga y golpea con él al pterosaurio, matándolo en el acto, en plena caída Goku lo lanza, consiguiendo sujetar a Bulma a un barranco con él, salvándola de una muerte segura.
El primer capítulo concluye con Bulma llorando colgando del abismo, gritando que se ha hecho pipí.
Spoiler:
- Akira Toriyama realizó el primer episodio íntegro a color. En él vemos dos coloreados distintos, uno a todo detalle y otro con tonos más simples centrándose sólo en el color de los personajes, denominado "bitono". A lo largo de la obra veremos este tipo de coloreado bitono, dándonos lugar a cosas tan curiosas como supersaiyanos con el pelo rojo. Cabe destacar que es el único capítulo en el que Bulma aparece en el coloreado a todo detalle con el pelo azul en lugar de lila, por lo que suponemos que el anime cogió este capítulo para basarse en el color de su pelo, que en el resto del manga es oficialmente lila.
- Llama la atención, el hecho de que Goku llame “delgadita” a Bulma, aún cuando ni siquiera sabía que esta era una chica.
- Cuando Bulma le cuenta a Goku que quiere reunir las bolas de dragón, este curiosamente piensa que va a hacerse un rosario con ellas y rezar a Buda, lo que podría hacer pensar que existe el budismo en dragon ball.
- Son Goku está parcialmente basado en el personaje popular del folklore chino Sun Wukong, basado en las historias de la dinastía Tang y protagonista de la obra literaria "Viaje al Oeste", Son Goku hereda del Rey Mono su prodigiosa fuerza, su cola y la tenencia de un bastón capaz de alargarse a voluntad, basado en el Ru Yi Bang.
- Esta primera saga de Dragon Ball está fuertemente inspirada en Viaje al Oeste, donde un monje budista debe hacer un viaje a la india en pos de reunir unos textos religiosos en compañía del Rey Mono (Aquí vemos las similitudes con Bulma, que viaja en busqueda de las siete bolas de dragón en compañía de Son Goku) el diseño de Son Goku y la concepción general del personaje están basados en Tanton, el protagonista de Dragon Boy, una obra de Akira Toriyama anterior a Dragon Ball.
-El diseño de Shenron de nuevo ya fue utilizado por Toriyama anteriormente en Dragon Boy, siendo el pequeño dragón que Tanton era capaz de invocar gracias a una bola.
-El kanji que Gon Goku tiene en la puerta de su casa es 福 - “Fuku” (ふく, “alegria”)
- Llama la atención, el hecho de que Goku llame “delgadita” a Bulma, aún cuando ni siquiera sabía que esta era una chica.
- Cuando Bulma le cuenta a Goku que quiere reunir las bolas de dragón, este curiosamente piensa que va a hacerse un rosario con ellas y rezar a Buda, lo que podría hacer pensar que existe el budismo en dragon ball.
- Son Goku está parcialmente basado en el personaje popular del folklore chino Sun Wukong, basado en las historias de la dinastía Tang y protagonista de la obra literaria "Viaje al Oeste", Son Goku hereda del Rey Mono su prodigiosa fuerza, su cola y la tenencia de un bastón capaz de alargarse a voluntad, basado en el Ru Yi Bang.
- Esta primera saga de Dragon Ball está fuertemente inspirada en Viaje al Oeste, donde un monje budista debe hacer un viaje a la india en pos de reunir unos textos religiosos en compañía del Rey Mono (Aquí vemos las similitudes con Bulma, que viaja en busqueda de las siete bolas de dragón en compañía de Son Goku) el diseño de Son Goku y la concepción general del personaje están basados en Tanton, el protagonista de Dragon Boy, una obra de Akira Toriyama anterior a Dragon Ball.
-El diseño de Shenron de nuevo ya fue utilizado por Toriyama anteriormente en Dragon Boy, siendo el pequeño dragón que Tanton era capaz de invocar gracias a una bola.
-El kanji que Gon Goku tiene en la puerta de su casa es 福 - “Fuku” (ふく, “alegria”)